Dos cosas llenan mi ánimo de creciente admiración y respeto, a medida que pienso
y profundizo en ellas: el cielo estrellado sobre mi y la ley moral dentro de mí.
Immanuel Kant (Crítica de la razón práctica)
Antes de empezar a hablar sobre las propuestas que citaré a continuación, querría decir que no estoy en contra de las nuevas tecnologías y lo que el mundo digital ha facilitado en la vida de las personas; pero como todo en esta vida tiene sus peligros y hay que ponerles límites para evitar los caminos que están afectando a tantos de nosotros, sobre todo en las nuevas generaciones, como la dependencia de las pantallas, la incomunicación o el aislamiento. Es a este exceso en nuestras vidas a lo que se podría definir como el monstruo, con diferentes cabezas semejante a una hidra, de las pantallas. Tampoco estas propuestas están pensadas únicamente para las más jóvenes, sino que al menos las dos primeras son válidas para todo el mundo.
La primera propuesta es el “Cuaderno personal”. Desde luego al referirnos a un cuaderno no pensemos en nada de tablets u otros aparatos electrónicos, sino a una serie de hojas de papel (blancas, cuadriculadas, con renglones, etc.) dentro de dos tapas duras(cartón, plástico, tela…). ¿Y que podría ser un cuaderno personal? Pues imaginémoslo como un gran cajón de sastre donde caben muchas cosas que puedan interesar a su poseedor (diarios, poesías, frases o pensamientos de otras personas, dibujos, fotos, recortes, partituras, etc.). Pero en todo ese maremágnum de posibilidades debería haber una que le diese ese sello personal, y sería un texto de cosecha propia de su dueño (diario, poesías, reflexiones, anotaciones, relatos, extravagancias, etc.). Sería como un espacio propio, una habitación de paredes de papel, que cada uno decora a su gusto y por otro lado le ayuda a ser uno mismo. Ademas de su fin existencial, de buscar un medio por el que expresarse y afirmar las cosas que te interesan, debe haber un criterio estético, como la buena letra (desde luego tiene que escribirse a mano), buscar una correcta y elegante redacción, decorarlo, bonita maquetación etc. Este insistir en las formas, que habrá quien las prefiera más caóticas y transgresoras, ayuda a hacer de este cuaderno un fin en sí mismo. Un cuaderno personal nos puede ayudar a ser mas personas, abrir el corazón con más sinceridad a uno mismo y descubrir nuevos aspectos de la vida y el mundo. Así que ya saben, padres y madres, regalar a vuestros hijos un cuaderno en blanco, aunque puede que haya muchos que lo echen a un rincón, pero hay que tener paciencia, todo llegará.
Cuentan que en los comienzos del cine, cuando los hermanos Lumière pusieron la película “La llegada del tren” en un local, el público al ver acercarse hacia ellos el ferrocarril, se levantó y hecho a correr pensando que venía hacía ellos una locomotora de verdad. Algo parecido está ocurriendo ahora cuando la gente es tan adicta a las pantallas, que empieza a pensar que la realidad está dentro de ellas y no en el mundo que la rodea.
En los años 60 y 70 del pasado siglo, estuvieron de moda los “Cines Forum” en los que tras el visionado de una película, un grupo de personas, dirigidos por un moderador, hablaban y compartían sus opiniones sobre la misma; y es que la siguiente proposición es recuperar esta actividad. Nacido en los últimos días del siglo XIX, el cine fue la primera experiencia de los seres humanos ante una pantalla con imágenes en movimiento. El cine tiene unos límites, con una presentación y unos créditos finales; entre medias hay un relato al que se aplican también unas criterios de metraje, que obligan a una selección entre todo lo filmado. Además, está considerado como el séptimo arte o arte total por aglutinar todas ellas, y eso le hace dar un valor añadido en un mundo en el que nadie pone límite ni valora lo que está viendo en las pantallas. Por otro lado, el hacer una experiencia compartida en un Forum, lo socializa y enriquece. A la par, esto ayuda a recuperar y mantener vivo uno de los grandes patrimonios del siglo XX y parte del XXI; su cine. Es cierto que el Cine Forum es una actividad larga, como mínimo tres o cuatro horas, difícil de encajar en una jornada escolar. Pero de vez en cuando se puede desarrollar y no solo en el ámbito de la enseñanza, sino en centros culturales y en los propios cines, ahora con tantas salas pequeñas y a veces semi vacías. En una sociedad donde hay tanto soledad, el poder ver una película con otras personas y compartir la experiencia, dirigidos por alguien que no solo sabe de cine sino también tratar con la gente, puede ser muy enriquecedor. Hoy vemos series que parece que no tienen final, programas que buscan audiencia al precio que sea, y sobre todo pasamos horas ante pantallas sin límites, y poco nos plantearnos lo que estamos viendo. El Cine Forum nos pondría por un espacio limitado de tiempo, ante un medio que busca crear, expresar, comunicar y hacer arte, haciéndonos valorar el estar delante de una pantalla y compartir nuestros gustos y opiniones con otras personas.
Dicen que en Silicon Valley, los hijos de los que trabajan en la tecnología más puntera, estudian en colegios sin aparatos electrónicos y si con cuadernos, lapiceros y libros. No sé si esto es una leyenda urbana, pero aunque voy a hablar de la enseñanza, tan solo cito esto de manera anecdótica. Prefiero ademas hablar de enseñanza, palabra que tiene más valor para un docente que la de educación, que además de tener un cierto aire conductista, creo que debe estar más cerca del ámbito familiar, cuando lo hay. Todo esto es porque lo que voy a plantear aquí en esta última propuesta, corresponde a este sector de la enseñanza. Como profesor de secundaria en España, veo que desde hace tiempo, se tiende, salvo en unas pocas asignaturas privilegiadas, a considerar a las demás como medios y no como un fin en sí mismas.
Sin entrar en el bilingüismo, aunque esto no deja de ser utilizar unas asignaturas para practicar otros idiomas, hay una serie de actitudes transversales, como transmitir valores; aunque acaso no son el enseñar y aprender ya unos valores en sí mismos, adaptar las nuevas tecnologías y un largo etcétera donde se pierde el sentido de la misma asignatura. Es como si los Programas de Enseñanza se hubiesen convertido en una enorme habitación llena de cables que cruzan de un lado a otro de la misma, impidiendo llegar a esas puertas que son las asignaturas y abrirlas. Porque eso es una asignatura, una puerta que se abre a un mundo de conocimientos, habilidades y misterios que nos enriquecen como personas y también nos ayudan a conocer nuevas facetas de uno mismo. Pero con tanta carga curricular, las puertas se abren a medias. ¿Y como incide esto en el tema que nos ocupa?, pues una puerta que se abre es una opción más para interesarse e ir más allá de lo que hay tras una pantalla. Aparte de que uno empieza a pensar en que si se considera a las materias como medios, ¿no se acabará también haciendo lo mismo con las personas y no viendo en ellas un fin en si mismas?
Recapitulando brevemente para finalizar; el Cuaderno personal como un campo abierto del individuo hacia sí mismo y al mundo que desde el puede contemplar. El Cine Forum como una forma de ponerse delante de la pantalla por un tiempo limitado, valorando y compartiendo lo que se ve. Estas dos propuestas, ya dije que creo que son válidas para todas las personas, sin importar la edad. Finalmente, y ya en el ámbito de la enseñanza, el recuperar el valor de cada asignatura y lo que esta pueda aportar, desde su parcela, a la vida de los alumnos. Luego dejamos que el tiempo vaya pasando.