Biblioteca el Bárbaro 2
VV.AA.
Panini Ediciones
9788410510302
Segundo volumen que nos trae Panini de las aventuras de nuestro ídolo cimerio en la etapa Marvel original, donde se adaptan «libremente» algunos relatos originales de Howard, más bien «inspirados» por la continuación de sus andanzas que realizaron Sprague L. Camp y Lin Carter, que rellenaban periodos de la vida del futuro rey de Aquilonia en los huecos del autor original.
Nos encontramos ante un año interesantísimo y vital en todos los sentidos para la creación del personaje, su serie regular y la popularización posterior del mismo.
Por un lado, hubo que salvar las reticencias de Stan Lee que, aunque le maravillaba la colección, estuvo al borde cancelarla porque las ventas en cada número descendían y deseaba trasladar al ilustrador a otro producto, de carácter superhéroe: pasaron a una entrega bimensual, se realizó un análisis para que tanto en las portadas como en las tramas aparecieran otro tipo de enemigos, alejándose de las bestias humanoides, y se le añadió una compañera femenina, con personalidad pero con carácter de simple comparsa de chica en apuros con poca ropa, algo muy pulp, por otra parte, que proporcionaba un contrapunto llamativo tanto por egoísmo como su astucia frente a un Conan, cada vez más evolucionado y taciturno, con su propio código de honor y sus arranques de furia, casi perteneciente a otro plano mental en el que las mujeres resultan más bien una complicación en sus esquemas.
En otro orden, también experimentó los primeros cambios de atuendo, abandonando el casco con cuernos de los primeros episodios y adquiriendo ya una aspecto de cabello suelto, mucho más feral y bárbaro, y empleando, más bien, armas improvisadas ya que, en muchas ocasiones, extravía las pertenencias entre episodios, espada incluida, demostrando que el premio de sus correrías implica más bien una enseñanza vital que forjará la psique del futuro héroe en un mundo que, con cada entrega, se expande en riqueza, variedad, culturas y dioses, además de enemigos que serán clave como la primera aparición del brujo estigio Thot-Amon y una clara herencia lovecraftiana en varios detalles, como el de la raza de «hombres elefantes del espacio» que aparece en la que es, sin duda, una de las mejores historietas de este tomo.
Visitaremos emplazamientos emblemáticos con Shadizar, el laberinto de los ladrones, la Torre del elefante, los parajes de Nemedia, entre persecuciones, combates, acción a raudales pero con la característica de un guion que sabe reproducir ese lenguaje plástico, poéticamente muy rudimentario y recurrente pero que aspira a la belleza, del autor original. Es más, su guionista participaría con su pluma, posteriormente, en las adaptaciones cinematográficas protagonizadas por Arnold.
Un absoluto gozo para cualquier amante del cómic, de los clásicos de la «espada y brujería» y una buena forma de iniciarse, si no te has acerado nunca, en ese fascinante aunque muy amplio mundo mágico de Conan.
Espero con impaciencia las próximas entregas.