La exposición de los ensueños
Vicente Rodríguez Lázaro
Playa de Ákaba, 2016
‘La exposición de los ensueños’, escrita por Vicente Rodríguez Lázaro, es una espléndida y atrayente narración que nos propone un viaje onírico por el arte, la literatura y los senderos del conocimiento. Un libro que parte de una idea lúgubre -el protagonista principal tiene la firme intención de quitarse la vida-, para finalizar exaltando el ‘incalculable valor de la existencia’. Porque este nuevo y extenso relato de Rodríguez Lázaro es, sobre todo, un canto a la trascendencia. La reivindicación, por decir así, de una visión profunda y elevada del sentido de la vida.
A lo largo de las noventa páginas de esta narración, el autor ensalza la representación universal de la existencia y de ésta como construcción de un camino que, a pesar de obstáculos y avatares, nos conduce a formar parte de la historia común de la humanidad y, al unísono, del cosmos que nos circunda. Algo a lo que nuestro autor concede una significación decisiva, sobre la que va a girar los sorprendentes episodios de su relato.
Con Rol, el protagonista de ‘La exposición de los ensueños’, un funcionario jubilado y hastiado de una vida anodina, nos aproximaremos a las inquietudes de grandes maestros de la pintura como El Greco, Velázquez o Murillo que hacen repaso de su trayectoria, sus obras y de aquellas cuestiones que dejaron pendientes tras su muerte. Un ejercicio de imaginación que el autor extremeño puede permitirse realizar con destreza, no en vano Rodríguez Lázaro es un versado conocedor de la historia del arte. También nos toparemos con druidas y figuras quiméricas, o nos internaremos en el mundo clásico con Sócrates y atisbaremos, aunque sea de lejos, personajes como César, Pompeyo o Craso.
A través de las diferentes dimensiones paralelas por las que iremos transitando descubriremos la escritura «como liberación del sufrimiento», de qué manera la renuncia a un anhelo puede condicionar toda una vida o hasta qué punto puede verse quebrada por los estragos del tedio y el sinsentido, hasta derivar en un empeño autodestructivo.
Rodríguez Lázaro ha construido en estas páginas un relato claro, entretenido, carente de elementos innecesarios, elaborado con un lenguaje accesible pero muy trabajado (sello inequívoco de este autor), un estilo bien afinado que proporciona una gran fluidez a la lectura, donde los diferentes temas que se abordan en los once capítulos del libro encuentran una continuidad sin fisuras en el espacio narrativo.
La religión, en el capítulo ‘El confesor’, el devenir de las civilizaciones en ‘La ciudad del tiempo’ o el acercamiento a la Naturaleza como fuente de conocimiento en ‘El bosque de los secretos’, son algunos de los temas que plantea el autor. En el libro también hay lugar para una incisiva crítica social, como sucede en el capítulo ‘Los invisibles’, una censura contra quienes detentan el poder con «frialdad» e indiferencia manifiesta hacia sus semejantes, cuyas vidas son entendidas con una finalidad utilitarista carente de humanidad y humanismo.
‘La exposición de los ensueños’ es un relato con cuya lectura se disfruta. Una obra que nos muestra y quiere enseñarnos, por medio de los registros culturales presentes en el libro, «el valor que posee cada instante vital, a disfrutar de cada momento y a sacarle el máximo partido». ¡Carpe diem!, vaya, pero unido a un alto sentido de la existencia.