Rafael Pérez Estrada nació en Málaga en 1931 y hasta los años setenta no empezó su andadura literaria, abogado de profesión, vivió en los cincuenta en Madrid, donde hizo amistad con actores y escritores de la época. Murió en 2000 de un terrible cáncer cuando estaba alcanzando una popularidad y un prestigio que, en esta ocasión, le llegaba tarde. La obra de Pérez Estrada tiene en la imaginación su absoluta razón de ser, imaginación grandiosa, sencilla, mágica, deslumbrante, que llenan sus páginas de pequeños tesoros intemporales, como milagros de literatura e inteligencia. Pérez Estrada renovó el aforismo añadiéndole magia, personalidad y un sentido del humor único que llevaba él encima como aquella nube que perseguía a uno de sus personajes.
Los oficios del sueño, Libro de los reyes, La sombra del obelisco, La ciudad velada, La extranjera… son algunas de las obras más interesantes de Pérez Estrada. Desgraciadamente su sentido del humor, su inteligencia, su forma de convertir cada anécdota en un momento apasionado así como su extraña relación con sus loros, sus vecinos o sus pequeñas cosas se nos fueron con él y con aquella enfermedad desagradable pero su literatura queda con nosotros y es capaz, muy capaz, de enamorar al que busca, en un libro, algo distinto.