Dancing with the moonlit knight (Bailando con el caballero iluminado por la luna)
Genesis
Música: Tony Banks/Phil Collins/Peter Gabriel/Steve Hackett/Mike Rutherford
Letra: Peter Gabriel
Antes habían hecho muchas cosas, como recorrer la Biblia desde el Génesis hasta el Apocalipsis, transgredir todo, cometer el crimen de la guardería o bailar el foxtrot (solo es un repaso a su discografía). Incluso acabaron yaciendo junto al cordero en Broadway. Y después se marchó Gabriel dando fin a la historia interesante de Genesis. Después… otra historia muy diferente. En 1973, después del baile y antes del cordero, vendieron Inglaterra por la libra esterlina.
El álbum, publicado por Charisma fue sin duda el más elaborado por el grupo hasta la fecha, coincidiendo con una dedicación absoluta de Peter Gabriel en una época de máxima creatividad. Y es que incluso la portada maravillosamente pintada por una magnífica y talentosa artista como Betty Swanwick, ya mayorcita por aquel entonces, refleja cambios posteriores en el disco; la pintora añadió una cortadora de césped al lado del banco debido a la inclusión del tema I know what I like (in your wardrobe) —Sé lo que me gusta (en tu armario)— que fue lanzado como single. Y el tema, que abre el disco, fue también incluido en la gira de 1974 junto con otros del mismo álbum y la totalidad de The lamb lies down on Broadway. En poco más de 8 minutos cuenta el desarrollo posterior del resto de la obra, tanto en su música como en su letra. Al fin y al cabo, fue el rock progresivo el que nos trajo la idea de álbum conceptual.
Comienza todo con una introducción a capella de Gabriel (la gran voz de este género junto al desaparecido Greg Lake). Poco a poco somos conducidos al teatro a través de música que podríamos considerar de cámara. (El cantante siempre se disfrazaba de forma múltiple en los conciertos). La canción parte de una vieja tonada escocesa combinada con ideas pianísticas de Gabriel unidas a través de un material que fue escribiendo Hackett. Después hay de todo: influencias rusas, jazz, fusiones varias, música medieval, de cámara…Guitarras acústicas, flautas, teclados (piano, mellotrón y Hammond) y un gran solo de guitarra de Steve nos transportan al ambiente que se respira en todo un tema en el que no sobra ni la pandereta de Gabriel enfatizando muy bien la percusión
Y ahora la letra:
«Can you tell me where my country lies?»
Said the unifaun to his true love’s eyes
«It lies with me!» cried the Queen of Maybe
For her merchandise, he traded in his prize
«Paper late!» cried a voice in the crowd
«Old man dies!» The note he left was signed ‘Old Father Thames’
It seems he’s drowned
Selling England by the pound
Citizens of hope & glory,
Time goes by, it’s the time of your life
Easy now, sit you down
Chewing through your Wimpey dreams,
They eat without a sound
Digesting England by the pound
Young man says «you are what you eat» eat well
Old man says «you are what you wear» wear well
You know what you are, you don’t give a damn
Bursting your belt that is your homemade sham
The Captain leads his dance right on through the night
Join the dance
Follow on! Till the Grail sun sets in the mould
Follow on! Till the gold is cold
Dancing out with the moonlit knight,
Knights of the Green Shield stamp and shout
There’s a fat old lady outside the saloon
Laying out the credit cards she plays Fortune
The deck is uneven right from the start
And all of their hands are playing apart
Captain leads his dance right on through the night
Join the dance
Follow on! A round table talking down we go
You’re the show
Off we go with, you play the hobbyhorse,
I’ll play the fool
We’ll tease the bull
Ringing round & loud, loud & round
Follow on! With a twist of the world we go
Follow on! Till the gold is cold
Dancing out with the moonlit knight,
Knights of the Green Shield stamp and shout
Y su correspondiente traducción:
“¿Puedes decirme dónde yace mi país?”
Preguntó el unifauno a los ojos de su amada
“¡Está conmigo!”, gritó la reina del quizá
Por su mercancía, el canjeó su premio
“¡Últimas noticias!”, gritó una voz entre la multitud
“¡El viejo ha muerto!”. La nota que dejó estaba firmada por ‘El Viejo Padre Támesis’
Parece que se ahogó
Vendiendo Inglaterra por la libra
Ciudadanos de la esperanza y de la gloria
El tiempo pasa, es el tiempo de tu vida
Cálmate, siéntate
Masticando tus sueños Wimpey
Comen sin hacer ruido
Digiriendo Inglaterra por la libra
El joven dice “Eres lo que comes”, come bien
El viejo dice “Eres lo que vistes”, viste bien
Sabes lo que eres, no te importa un comino
Reventando tu cinturón que es tu engaño casero.
El capitán dirige su baile a través de la noche
¡Únete al baile!
¡Sigue! Hasta que el sol del grial quede fijo en el molde
¡Sigue! Hasta que el oro esté frío
Bailando con el caballero iluminado por la luna
Los caballeros del escudo verde patalean y gritan
Hay una vieja dama gorda fuera del salón
Gastando sus tarjetas de crédito en juegos de Azar
La baraja está marcada desde el principio
Y todas las manos esconden cartas
El capitán dirige su baile a través de la noche
¡Únete al baile!
¡Sigue! Bajamos hacia una mesa redonda.
Eres el espectáculo con el que vamos
Tú juega con el caballito de madera
Yo me haré el loco
Burlaremos al toro
Repicando fuerte a su alrededor, fuerte a su alrededor
¡Sigue! Con un giro del mundo en el que vamos
¡Sigue! Hasta que el oro esté frío
Bailando con el caballero iluminado por la luna
Los caballeros del escudo verde patalean y gritan
Podríamos hablar de un cierto manierismo en la canción; después de todo, lo barroco siempre acompañó al rock progresivo en sus inicios, como después lo hizo el romanticismo. Parece como si el rock hubiera recorrido en 10 años la historia completa de la humanidad (¡ojo, solo lo parece!), y es que fue escrito por jóvenes de mentalidad un tanto renacentista, interesados por todo, estudiosos eternos como es el caso de un Peter Gabriel que no para de investigar e innovar en la música.
El simbolismo carga todo el tema. Ya sobre el escenario, Gabriel aparece vestido de Britania con su bandera, escudo y lanza (una personificación de una especie de deidad basada en la Grecia clásica). Antes de empezar, nos anuncia que viene un nostálgico recuerdo de la vieja Inglaterra acentuando la crítica a la sociedad inglesa del 73 y a lo que presumía (con bastante acierto) que iría ocurriendo posteriormente.
Unifauno… ¿Es unicornio, uniforme, fauno? No parece tener relación con algo tan mitológico pero el autor quiere dársela aproximándolo a una especie de mercenario defensor de la antigua Inglaterra. O sea, más que de un concepto particular, se trata de simple nostalgia. Y lo relaciona con la Reina del Quizá, que en el pasado era una expresión referida a una temporada afortunada y a la esperanza de una buena cosecha. La antagonista actual de esa Queen of Maybe no sería otra que la reina de la Oportunidad (Queen of Chance), representante del nuevo país. En la actualidad, ambos conceptos solo se utilizan en anuncios comerciales y campañas de marketing.
El hecho de vender Inglaterra por la libra es un ingenioso y surrealista juego de palabras para definir como la sociedad actual ha mercantilizado los derechos, algunos tan fundamentales como el de la comida. Y es que el Támesis es la auténtica representación de la vieja Inglaterra que no deja de fluir y cambiar. A ese concepto de Heráclito vuelve a hacerse referencia en el tercer tema del álbum (Firth of Fifth) cuando viene a decir que “Las arenas del tiempo fueron mermadas por el río del constante cambio”. Un río que se ahoga constituye, desde luego, un bello recurso poético. Sin el viejo padre Támesis, ya es el dinero el que mueve todo el país.
Los ciudadanos de la esperanza y la gloria no son sino los ingleses; de hecho, otra referencia más, en este caso a Land of Hope & Glory, compuesta por Edward Elgar en 1902, generalmente más conocida por Pomp & Circumstance. Se hace alusión a la antigua y muy británica cadena de hamburgueserías Wimpey, que invitaba a tomarse las cosas con tranquilidad y es que su lema venía a decir algo como “Te pagaré encantado el martes la hamburguesa de hoy”.
El Grial es justo lo que parece; la misteriosa copa de Cristo llevada a la decadente Camelot por el artúrico Sir Perceval (o el wagneriano Parsifal o no sé quién la llevaría a Valencia).
Los Green Shield Stamps se obtenían en muchas tiendas cuando se compraban artículos (no es un rasque y gane, pero casi). Esos cupones podían ser intercambiados posteriormente por otros artículos (si alguien recuerda aquello del “Cupón Hogar Moderno”, enhorabuena, está próximo a la jubilación, si no la ha alcanzado ya).
El caballito de madera y el loco son personajes del tradicional (e inglés, cómo no) baile de Morris. El juego de palabras “Gold is cold” es una forma de llamar a la puesta de sol, hecho que no ocurría en el Imperio británico (puede que lo copiaran de Felipe II, quién sabe) y finalmente lo de hablar bajo y alto, negociando en una mesa redonda… mucha política, pero ya sin Arturo y con Merlín durmiendo.
No puedo dejar de recomendar el disco entero; al fin y al cabo, este tema solo es el principio.
Ah, y algún día volveremos para ver qué pasó con aquel cordero en el neoyorquino Broadway, incluso en un libro; el espacio aquí se llevaría toda la revista (y eso que es digital).
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