La nueva novela La pistola de mi padre (Contrabando, 2024) de Rafael Soler se ha presentado el pasado 11 de noviembre en el Colegio Territorial de Arquitectos de Valencia (CTAV). La novela que ahora ve la luz es la séptima entrega narrativa del autor.
Rafael Soler cuenta con una dilatada trayectoria literaria que abarca poesía, novela y relato. Su obra ha recibido numerosos reconocimientos y siempre ha contado con una gran acogida por parte de la crítica y del público. A su vez, desde «Los Lunes del Comercial» —veladas poéticas del legendario Café Comercial de la madrileña glorieta de Bilbao— Soler hace semanalmente una impagable labor de difusión de la lírica contemporánea.
Recientemente, el autor valenciano ha sido nombrado «Juglar de Fontiveros 2024» y se ha incorporado a la prestigiosa Academia de Juglares de esta localidad abulense.
En palabras de Luis Landero, Premio Nacional de las Letras Españolas (2022): «Rafael Soler es uno de los grandes poetas de nuestro tiempo, y un novelista radicalmente personal. No busquen comparaciones: no se parece a nadie. Su forma de narrar, su estilo y su mundo, son marca de la casa, suyos e inconfundibles. La pistola de mi padre es la historia de una familia contada por un narrador insólito. Pero los asombros que nos reserva su lectura no están solo en el decurso de la fábula sino en cada capítulo, en cada página y cabe decir que en cada línea. Su prosa creativa, plena de hallazgos expresivos, la esgrima verbal de los diálogos, la sorprendente variedad de recursos narrativos, la originalidad y fuerza de los personajes, el ritmo narrativo sostenido y vibrante, y el condimento de un humor que es también exclusivo de este escritor extraordinario, convierten La pistola de mi padre en una obra excepcional».
Rafael Soler es uno de los poetas más interesantes del panorama actual (con siete poemarios publicados). A ellos hay que sumar sus novelas: El sueño de Torba (1983), Barranco (1985), El último gin-tonic (2018), Necesito una isla grande (2019) y Dos novelas de la transición (El grito y El corazón del lobo) (2023); a las que viene a sumarse La pistola de mi padre, que ahora se publica. El autor también tiene en su haber dos libros de relatos: Cuentos de ahora mismo (1980) y El mirador (1981).
La novela
En La pistola de mi padre el autor vuelve por sus fueros para ofrecernos una inquietante historia familiar, desde los días de la posguerra hasta la actualidad. La novela nos cuenta —a través de un narrador insólito, que no elude contrastar los puntos de vista de los distintos personajes, siguiendo un enfoque cuasicinematográfico— el encuentro de los cuatro miembros de un mismo núcleo familiar durante nueve intensas horas. Esta circunstancia le permite al escritor no solo escarbar en los entresijos de las complejas relaciones familiares sino reflexionar a su vez en cómo la historia colectiva de nuestro país ha influido y condicionado la conducta de los personajes. La trama concluirá de manera abrupta con un inesperado suceso que resulta sorprendente. Si el título de la novela nos hace pensar en el principio llamado «el arma de Chéjov», el final no se queda atrás…
En suma, La pistola de mi padre es una novela rebosante de matices —que el final juega inteligentemente con la estructura narrativa—, llena de profundidad y sutiles sugerencias, trufada de arrebatos líricos de un Rafael Soler que no está dispuesto a renunciar a su condición de poeta, aunque en estos casos la prosa imponga sus rigores.
