Piedra, papel, palabra
Daniel Mustieles
Ediciones Adarve, 2019
El pasado otoño vio la luz el poemario Piedra, papel, palabra de Daniel Mustieles, opera prima de este autor, donde entrega al público lector 49 poemas y prosas poéticas y 21 ‘miniaturas’. Una obra estructurada en cuatro secciones. Las tres primeras responden a lo enunciado en el título del libro. En la cuarta y última encontramos las ‘Miniaturas’, donde el autor ha reunido textos que, en mi opinión, están a medio camino entre el aforismo (un género que cultivan hoy cada vez más autores) y la poesía.
Estamos pues ante un libro consistente, en el que Mustieles ha querido presentar una muestra muy completa de su bagaje literario y de su voz poética aún en construcción, pero con unos planteamientos muy sólidos que ya han dado frutos y, a buen seguro, continuarán dándolos en la futura trayectoria de este poeta. Porque en los versos de este libro hay, sin duda, un poeta.
La poesía de Mustieles es honesta y cercana, un canto a la existencia que surge desde lo más hondo del sentir de este autor cuya obra poética comenzamos a conocer ahora. El poeta se expone sin reservas en este poemario. Sus reflexiones, ideas, sentimientos,… se expresan con una espontaneidad que es de agradecer y son la substancia con la que configura cada uno de sus poemas.
La primera parte del libro, ‘Piedra’, da comienzo con un poema de excelente factura titulado ‘Loco’: ‘Pero tal vez sean esas ilusiones rotas / las que hacen que duela. / Quizá sea un trozo que falta, una pieza de algo / que ahora está incompleto, / hecho añicos.’, apunta el poeta.
Varias prosas poéticas, donde el autor da testimonio de su quehacer creativo, dan continuidad al discurso poético de Daniel Mustieles. Así descubriremos textos de notable interés, como los poemas ‘Solitaria libertad’ o la prosa poética ‘La derrota de la soledad’. Otro poema relevante aquí es ‘Mi dualidad’, versos en los que el autor desea revelar aquello que le conduce a la escritura.
En el apartado del libro titulado ‘Papel’ la labor poética es en sí misma tema de diversos poemas, como ‘Donde nace la poesía’, ‘Versos para un día cualquiera’, ‘Resistencia poética’ o ‘Poetica nocte lux hominun’. Pero también lo es el amor, los sueños, la amistad,… y una declaración de intenciones sin ambages que hallamos en ‘Poema para golpes de Estado y otros menesteres’, en cuyos versos el poeta clama con acierto: ‘¡Sacad la poesía a las calles!’
Como no podría ser de otra forma, la ‘Palabra’ es protagonista de la tercera parte de este poemario. El juego de imágenes del poema ‘Contracorriente’, la exaltación de la lectura y de ciertos registros culturales en el poema ‘Viviendo en los libros’, las prosas poéticas ‘Tatuodrama’ o ‘Nanocuento’ y las originales ‘Instrucciones para leer un libro’, son algunos de los trabajos con los que el poeta parece querer reivindicar la palabra, la palabra poética o literaria, no solo como elemento expresivo sino también como material indispensable para confeccionar su personal ars poetica.
Ponen colofón al libro las ya mencionadas ‘Miniaturas’, donde el poeta agudiza el ingenio. Frases que bien pudieran ser versos de poemas nacientes o inconclusos y toman aquí forma de aseveraciones o máximas. Dos ejemplos: ‘Lo más parecido a un beso que he encontrado es un libro’ o ‘Al elegir, siempre corres el peligro de saltar al abismo sin enterarte’.
Por todo lo dicho, la poesía que contiene Piedra, papel, palabra de Daniel Mustieles merece ser leída con atención, porque como escribe el autor ‘No callarán las voces de aquellos que nacieron para que sus palabras fueran escuchadas’. Escuchemos pues lo que tiene que decir este poeta.
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