La formación y el desarrollo cultural de los trabajadores fue una preocupación constante de las Sociedades Obreras de la UGT. En este sentido, contamos con una monografía sobre la cuestión, y que, además se centra en el período en el que se inscribe la experiencia que contamos en este artículo. Se trata del libro de Francisco de Luis Martín, La cultura socialista en España. 1923-1930. Propósitos y realidad de un proyecto educativo, Universidad de Salamanca, 1993. Efectivamente, aquí nos hacemos eco de una de las conferencias que Gabriel Pradal pronunció en el salón grande de la Casa del Pueblo de Madrid dentro del cursillo de “Nociones de historia de la edificación”, que impartió y que había organizado la activa Sociedad de Albañiles “El Trabajo”. Tuvo lugar en marzo de 1929.
Gabriel Pradal (1891-1965) fue un arquitecto que comenzó su actividad dentro del Ayuntamiento de Madrid, además de terminar siendo decano presidente del Colegio de Arquitectos de Madrid en la República. Fue el autor de las viviendas obreras de la Ciudad Jardín en la Prosperidad, de la Mutualidad Obrera de la calle Eloy Gonzalo, y de reformas importantes en distintos edificios de la UGT y el PSOE, construyendo también mucho en Almería, de donde era natural. En 1919 ingresó en la Agrupación Socialista Madrileña, fue diputado en 1931, y se destacó en el ámbito de los ingenieros y arquitectos de la UGT. En el exilio tuvo muchas y diversas responsabilidades, como ser miembro de la Comisión Ejecutiva del Partido Socialista, o dirigir El Socialista, entre otras. Pradal fue un arquitecto comprometido de forma intensa con la causa socialista y obrera. Estas clases artísticas para los albañiles constituyen un ejemplo de lo que decimos.
Pradal se centró en las construcciones del Renacimiento en su charla, afirmando que su arquitectura se diferenciaba de las que ya había explicado en que la anteriores tenían una “mecánica bien definida”, como se habría producido con los estilos egipcio, griego, “algo el romano” y aún el bizantino y el gótico. A partir de la decadencia de este último estilo se llegaría a lo que el llamó la “expresión plástica lógica”.
El camino del Gótico al Renacimiento no obedecería a un desplazamiento de pueblos, sino a un cambio social en los pueblos occidentales, que suponía un despertar frente a la Edad Media. Pradal explicó, primeramente, los cambios en la ciencia y la mecánica, terminando con la imprenta. Al abordar la arquitectura en sí, partió de la gótica del siglo XV para enlazarla con el Renacimiento nacido en Italia, y especialmente en Florencia. La arquitectura gótica habría sido precaria en Italia, y por ello les había sido más fácil allí volver a las formas clásicas, resucitando, a primeros del siglo XV, las columnas romanas; pero el movimiento no se propagaría por Europa hasta el siglo XV. Explicó el desarrollo del Renacimiento a partir de Santa María del Fiore, y su cúpula. Pradal empleó un moderno sistema para enseñar, con un proyector. Y así pudo mostrar a los trabajadores San Lorenzo de Florencia, a la que definió como parecida a las basílicas romanas, pero ya con la característica de los arcos sobre el entablamento. Se demoró, como no podía ser de otra manera, en la importancia de Brunelleschi en el cambio arquitectónico. También habló de la importancia del mecenazgo de los Médicis, tanto en Florencia, como a través del Papado en Roma.
Explicó el papel de Miguel Ángel en la arquitectura para luego pasar al Renacimiento español, afirmando que fue asimilado muy pronto con fisonomía propia a través del Plateresco. Empleando la pantalla explicó el Palacio de Cogolludo, la Casa de la Muerte de Salamanca, y de estilo plateresco con influencia romana, el Colegio de Santa Cruz de Valladolid, el Palacio de Peñaranda de Duero, la Catedral nueva e Iglesia de San Esteban en Salamanca, en las que se apreciaría el choque entre el Gótico y el Renacimiento, la Casa de Salinas de Salamanca, en la que se apuntaría el Barroco, y un palacio de Santander.
Finalmente, proyectó la Catedral de San Pablo de Londres y la de Santa Genoveva en París, panteón de hombres ilustres, para explicar que sus cúpulas, aunque posteriores al Renacimiento, se apoyaban en dicho estilo. La charla terminó anunciando la siguiente que impartiría sobre el Monasterio de El Escorial.
Hemos empleado el número 6275 de El Socialista, y el Diccionario Biográfico del Socialismo Español. Además, sobre Pradal podemos consultar la siguiente obra: PRADAL BALLESTER. Gabriel Pradal (1891-1965): notas biográficas y documentales, Almería, Instituto de Estudios Almerienses, 1991.