Madrid Canela 1966
Cayetano Santana
Editorial C&M, 2022
El escritor onubense Cayetano Santana ha puesto en circulación en abril de 2022, en la sevillana Editorial C&M, su última novela Madrid Canela 1966.
Después de Las mujeres imposibles, que viera la luz en abril de 2018 con Versátiles Editorial, Santana parece empeñado en demostrarnos que ha llegado a la literatura para quedarse; que tiene cosas que decir, que contar, que viene a ser lo esencial en un narrador y por ende en cualquier escritor.
Este profesor de Filosofía nacido en Lepe nos aporta en Madrid Canela 1966, a través de una serie de personajes bien dibujados, su particular visión de aquella España gris y monocorde de los años sesenta, y que, los que ya peinamos canas, recordamos a la perfección. Los epicentros ambientales de la misma son la ciudad de Madrid por un lado y el idílico espacio de Isla Canela (Ayamonte) por otro. El centro y la periferia. Lo urbano y lo rural. El ruido y el silencio. La realidad y los sueños. Lo permitido y lo deseado. Lo centrípeto y lo centrífugo. Lo delineado por mano del hombre y lo construido por la naturaleza. En esas dicotomías deambula Claudio Malavado, el personaje principal de esta novela; un tipo asqueado de su quehacer en la capital, a pesar de su posición holgada y estable tanto en lo familiar, lo social, como en lo profesional, que decide romper con todas las ataduras y borrarse del mapa, es decir, simular su muerte, adquirir una nueva identidad, y así convertirse en el hombre ideal que deseaba ser y no el que el destino fraguó, con su aquiescencia o no.
Cayetano Santana nos regala un fresco en donde la necesidad parece ganarle la partida a la duda, ese componente que hace de nuestros días y nuestras horas arquetipos inevitables de una sociedad dada, en este caso, la España de las fechas que hablamos.
Utilizando una pluralidad de voces e incluso una mezcla de estilos que van desde el monólogo hasta la narrativa omnisciente, pasando por la disertación especulativa y también filosófica -que se encuentra presente en todo el texto-, además de la casi ausencia de diálogos, Santana consigue una novela ajustada al principio de credibilidad, que es a la vez la consumación de un deseo, la aspiración de cambiar la realidad, de dejar de ser lo que se aparenta, para ir a la búsqueda de lo que ciertamente se es: “Es la voluntad y no la razón lo que me interesa, una voluntad afirmativa, creadora de valores, más allá de la vieja y estrecha moralidad que iguala bien, virtud y razón, así seré yo, el nuevo Malavado.”
La nueva entrega de Cayetano Santana supone una huida, un tránsito hacia lo elemental, hacia el terreno de lo básico, de lo que permanece, de lo primario si lo desean, como única forma de encontrar el sentido germinal de la existencia. Pero, aparte de eso, como ya dije, la novela está cruzada de cabo a rabo, por otra novela con una dimensión más profunda que el lector deberá buscar y de la que nada adelantaré, excepto lo siguiente: es como si el protagonista fuera de la complejidad cerebral y hasta enfermiza de Nietzsche, siempre presente en la misma, a la virtud dialogal de Sócrates. Usted mismo.