El Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid (MNCN-CSIC) ha presentado el documental* EVOLUCIÓN. 250 años del Museo Nacional de Ciencias Naturales, uno de los eventos más esperados de entre los que el MNCN ha preparado para conmemorar su 250 aniversario. La película, que podrá verse del 29 al 6 de mayo en el Pequeño Cine Estudio de Madrid y se emitirá en La 2 en torno al 5 de junio, día del medio ambiente, revela aspectos fascinantes de esta institución que abrió sus puertas al público hace un cuarto de milenio. A través de conversaciones con personalidades del mundo de la cultura, el arte, la educación y, por supuesto, la ciencia, se van revelando aspectos tan desconocidos como fundamentales de esta organización. El recorrido a lo largo de las salas y las colecciones del museo, muestra los aspectos que han convertido a este centro de investigación en un referente del mundo de la ciencia, las colecciones de Historia Natural, la educación y la divulgación científica.
A través de una jornada en el museo, el espectador descubrirá las facetas más desconocidas de uno de los museos más antiguos del mundo
Gracias a la participación del paleontólogo Juan Luis Arsuaga, el escultor Theo Jansen, la artista Lita Cabellut, el maestro César Bona, la oceanógrafa Sylvia Earle, la presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, el director del museo Naturalis, Edwin van Huis, la historiadora María Ángeles Samper o los biólogos Miguel Delibes de Castro y Odile Rodriguez de la Fuente junto a personal del museo, la institución trasciende más allá de sus puertas para mostrar sus distintas facetas.
Así, a lo largo de una jornada, el espectador va conociendo el análisis de diferentes protagonistas sobre la relevancia que tienen las colecciones de Historia Natural, cuál es el papel de Homo sapiens en el planeta, aspectos de la crisis ambiental en la que estamos inmersos, cómo influye la naturaleza en el mundo del arte, la importancia que tienen la investigación y la educación en nuestro futuro o qué hace la Guardia Civil en los pasillos del Museo.
El documental, de una hora de duración, ha sido dirigido por Mario Cuesta, productor audiovisual que ya sorprendió con su película Antártida, un mensaje de otro planeta que, además de tener más de 5 millones de espectadores en todo el mundo, ha recibido varios premios en festivales internacionales. “El Museo Nacional de Ciencias Naturales ocupa un lugar muy especial porque casi todo el mundo lo relaciona con sus primeras experiencias en un museo. Es un espacio que emociona porque nos conecta directamente con nuestra infancia. Sin embargo, cuando tienes la oportunidad de conocerlo, te das cuenta de que tiene muchísimos más aspectos. Mi objetivo a la hora de plantear la película ha sido siempre descubrir al espectador esas partes desconocidas transmitiendo la emoción con la que lo visitan los niños, la implicación de quienes trabajan en él y la relevancia de su labor como institución científica”, explica el director del documental.
“Este proyecto estuvo desde el inicio entre las acciones que quisimos desarrollar para celebrar nuestro 250 aniversario”, expone el director del MNCN, Rafael Zardoya. “No queríamos limitarnos a contar una sucesión de eventos históricos, sino ofrecer a quienes no nos conocen una visión general y amena de lo que se hace en este museo, así como su relevancia nacional e internacional y, creo que lo hemos conseguido”, continua Zardoya.
Está dedicado a Emiliano Aguirre, paleontólogo premio Príncipe de Asturias, descubridor de Atapuerca y director emblemático del MNCN
“Gracias a la participación del personal del museo, así como de personas ajenas a la institución y al formato centrado en conversaciones cercanas, creo que hemos logrado un documental que engancha y que va más allá del relato meramente institucional que podría haber sido”, apunta Cuesta.
“Uno de nuestros objetivos con esta producción es llegar a las personas que todavía hoy desconocen la existencia de esta institución, y queremos llegar a ellos para que se sientan orgullosos de contar con un museo como este”, comenta Pilar López García-Gallo, vicedirectora de Comunicación y Cultura Científica del MNCN. “Realmente, creo que es muy importante que la sociedad sepa que este museo, que es el museo de todos, lleva abierto 250 años, que fue prácticamente el primero del mundo que abrió sus puertas a toda la ciudadanía, sin importar su clase social y que, además de ser un referente de las ciencias medio ambientales, lleva décadas formando a niños y también a adultos, en el respeto y conocimiento de la naturaleza”.
El documental ha contado con el apoyo económico del Ayuntamiento de Madrid, la Embajada de los Países Bajos, la Fundación General CSIC y SEO/Birdlife así como con espectaculares imágenes de naturaleza cedidas por la productora Into the Wild.
Un homenaje imprescindible
La película está dedicada a Emiliano Aguirre (1925-2021), paleontólogo de relevancia internacional que siempre consideró al MNCN como su hogar en lo que a su labor científica se refiere. El que fuera director del yacimiento de Atapuerca, labor por la que recibió el Premio Príncipe de Asturias de Investigación en 1997, dirigió el MNCN solo dos años, en 1985 y 1986, pero le bastaron para iniciar la recuperación de la institución, que se encontraba en una situación extremadamente compleja debido al abandono institucional. Logró que se retomara la investigación en el museo, comenzó la revisión de las colecciones e impulsó la actualización de las exposiciones, poniendo así los cimientos para que evolucionara hasta convertirse en lo que es hoy.
Emiliano fue, además, una figura fundamental para la paleontología española, disciplina en la que actualmente el país es un referente mundial, y lo hizo apoyándola y promoviéndola la desde la educación, dirigiendo las tesis doctorales de científicas y científicos que se han convertido en la actualidad en grandes expertos de la paleontología mundial. “Acabamos de dedicar a su memoria nuestro salón de actos y si tengo que lamentar algo del documental, es que él no haya podido verlo, estaba muy orgulloso del MNCN y estoy seguro de que lo habría disfrutado”, concluye Rafael Zardoya.
Trailer del documental